El Experimento
Después de años creando canales de YouTube tradicionales y acumulando más de mil millones de visualizaciones, quería demostrar algo: que todo ese conocimiento sobre audiencias, algoritmos y formatos podía aplicarse a un nuevo paradigma.
Creé un canal de animación infantil 100% generado con IA. Sin estudio. Sin equipo. Sin presupuesto. Solo yo, las herramientas adecuadas y 15 años de criterio.
Esto no es el futuro. Esto ya está pasando. Y las marcas que quieran sus propias series en la pantalla que ya domina los salones —YouTube— pueden hacerlo a una velocidad y coste que los estudios tradicionales no pueden igualar. No es cuestión de qué es más bonito. Es cuestión de quién llega primero y más veces a la pantalla.